Discurso inaugural de Christopher Mellon al Caucus UAP japonés. 5 de junio de 2024
Traducido al español. Un discurso valiente y lleno de interesantes matices como nos tiene acostumbrado. Christopher Karl Mellon, inversor de capital privado, ex subsecretario adjunto de Defensa para Inteligencia en las administraciones de Clinton y George W. Bush y más tarde para Operaciones de Seguridad e Información. Fue Director de Personal del Comité Selecto de Inteligencia del Senado de los Estados Unidos
Estimados miembros del Parlamento japonés,
En primer lugar, quiero expresar mi profundo respeto y admiración por el notable paso que ha dado al establecer un grupo dedicado a los fenómenos anómalos no identificados, comúnmente conocidos como ‘UAP’. Esta iniciativa marca un compromiso importante y admirable con la transparencia, la seguridad nacional y la investigación científica.
Durante décadas, el fenómeno al que ahora nos referimos como UAP ha capturado la imaginación y despertado la curiosidad de personas de todo el mundo, a pesar de los esfuerzos de muchos por menospreciar el problema. Estos sucesos de UAP han sido objeto de innumerables discusiones, investigaciones y especulaciones. La Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio se refirió con razón a la UAP como “Uno de los grandes misterios de todos los tiempos”.
Como funcionarios electos, sé que se necesita coraje político para enfrentar el estigma que durante demasiado tiempo ha rodeado esta cuestión de los UAP. Afortunadamente, los pueblos japonés y estadounidense tienen la suerte de contar con legisladores dispuestos a anteponer la seguridad nacional y la ciencia a consideraciones políticas estrechas.
Si alguna vez hubo alguna duda, ahora sabemos que la UAP es un problema global, que trasciende las fronteras nacionales y exige cooperación internacional. Mientras buscamos comprender la UAP, es mejor trabajar juntos, aunando nuestros recursos y experiencia por el bien de la seguridad nacional y el progreso científico, como lo hemos hecho en tantas otras áreas. Los esfuerzos de colaboración nos permitirán abordar amenazas potenciales de manera más efectiva y tal vez descubrir verdades que se encuentran más allá de nuestra comprensión actual.
También sabemos que desde el punto de vista de la seguridad nacional no se puede subestimar la importancia de identificar y monitorear los sistemas aéreos no tripulados. El inmenso impacto de los vehículos no tripulados en el actual conflicto en Ucrania se muestra a diario en Ucrania. Si nos mantenemos alerta e informados, podemos mejorar la seguridad nacional y aprovechar estas tecnologías para obtener resultados positivos.
Al lanzar este nuevo caucus, me gustaría compartir algunas observaciones de mis propias experiencias que espero resalten la importancia del trabajo que están realizando.
Observaciones y lecciones aprendidas
A pesar de la sofisticación y el avance de la ciencia y la tecnología humanas, la supervivencia de los Estados nacionales modernos sigue siendo un proceso fundamentalmente darwiniano. La clave para la supervivencia sigue siendo adaptarse con éxito a los cambios en el mundo que nos rodea. Esto es más desafiante que nunca porque el mundo que nos rodea está cambiando a un ritmo acelerado y sin precedentes.
Por lo tanto, es a la vez irónico y desafortunado que uno de los atributos notables de las burocracias modernas, especialmente las burocracias gubernamentales, sea su falta de transparencia y su resistencia instintiva al cambio –a menos, por supuesto, que el cambio implique una expansión de su autoridad o recursos. Por eso es más importante que nunca que los legisladores de las democracias modernas monitoreen y cuestionen vigorosamente las políticas, prioridades y presupuestos de las agencias gubernamentales, especialmente aquellas a las que se les han confiado responsabilidades de seguridad nacional. Esto no es microgestión; es similar a una junta directiva eficaz que se centra en la estrategia y los requisitos.
Aprendí esta importante lección al principio de mi carrera mientras trabajaba para el senador William S. Cohen en los Comités de Inteligencia y Servicios Armados del Senado. Me sorprendió ver repetidamente reformas desesperadamente necesarias con la feroz oposición del Departamento de Defensa, los servicios militares, el Estado Mayor Conjunto (JCS) y, a menudo, incluso la Casa Blanca. Proporcionaré algunos ejemplos para ayudar a ilustrar este punto.
Un problema importante al que se enfrentó el Departamento de Defensa de Estados Unidos después de la Segunda Guerra Mundial fue la excesiva independencia de los servicios militares. Esto produjo rivalidades inútiles entre servicios y una peligrosa incapacidad para equipar y entrenar fuerzas adecuadamente para operaciones conjuntas. El presidente Eisenhower propuso cambios en 1957 para solucionar este problema reforzando el poder de los comandantes combatientes y del presidente del Estado Mayor Conjunto. Sin embargo, estas propuestas fueron rechazadas en el Congreso después de que líderes militares filtraran afirmaciones falsas de que los cambios propuestos socavarían el control civil de los militares.
Estados Unidos siguió luchando por integrar sus fuerzas militares de manera efectiva, lo que se hizo evidente en operaciones fallidas como la misión de rescate de rehenes iraníes y el atentado contra el cuartel de los marines en Beirut. Luego, en la operación de Granada, supimos que las radios del Ejército y la Armada no eran interoperables y que las Fuerzas de Operaciones Especiales (SOF) no estaban integradas adecuadamente en la operación y, como resultado, sufrieron un número excesivo de bajas. Estos problemas sistémicos surgieron de la incapacidad de entrenar y equipar adecuadamente a las fuerzas para operaciones conjuntas efectivas.
Mientras formaba parte del personal del senador William S. Cohen, me sorprendió la feroz resistencia del Departamento de Defensa y del Estado Mayor Conjunto a las reformas eminentemente sensatas e importantes propuestas por los senadores Nunn y Goldwater. Afortunadamente, una mayoría a prueba de veto en el Congreso aprobó esta legislación crítica en 1986. Los beneficios se pueden ver en el marcado contraste entre las confusiones y desastres de las operaciones en Irán, Beirut y Granada versus la impresionante exhibición de fuerza conjunta sincronizada. mostrado por Estados Unidos y sus aliados durante la Tormenta del Desierto.
Este fue el único primer caso de resistencia a reformas muy necesarias que vi durante mi período trabajando para los Comités de Inteligencia y Servicios Armados del Senado.
. Presenté un proyecto de ley del senador Cohen para establecer el Comando de Operaciones Especiales de Estados Unidos y, por supuesto, el Pentágono también se opuso implacablemente a ello a pesar de sus méritos. Una vez más, el Congreso tomó medidas y, como resultado, las capacidades de operaciones especiales de Estados Unidos son mucho mejores.
. Como supervisor del presupuesto de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) en el Comité de Inteligencia del Senado en la década de 1990, encontré que los altos directivos no estaban dispuestos a redistribuir recursos de los programas existentes para comenzar a adaptarse al crecimiento explosivo de Internet. Una vez más, fue el Congreso el que inicialmente tomó medidas para rectificar esta deficiencia.
. Vi a la Fuerza Aérea reprogramar repetidamente fondos destinados por el Congreso para comprar puente aéreo que se necesitaba desesperadamente para las Fuerzas de Operaciones Especiales (SOF), porque la Fuerza Aérea prefirió usar esos fondos para aumentar su inventario existente de 550 F-16 en lugar de apoyar la misión de otro servicio.
. A veces, como fue el caso del Comando de Operaciones Especiales, hubo incluso resistencia después de que el Congreso aprobó una legislación que requería cambios. En el caso del Comando de Operaciones Especiales, la resistencia a la implementación fue tan feroz que el Congreso tuvo que aprobar legislación complementaria al año siguiente.
Ninguno de estos problemas críticos se habría abordado si no hubiera sido por una supervisión vigorosa por parte de los miembros del Congreso. Hoy en día existe un reconocimiento generalizado en el Pentágono de que estos cambios fueron para mejor. Podría dar muchos más ejemplos, pero espero que sean suficientes para subrayar por qué hoy es tan importante que los miembros de las legislaturas de las naciones democráticas sean asertivos en su papel como junta directiva de la nación. Con demasiada frecuencia, si se las deja a su suerte, estas burocracias no logran adaptarse a las amenazas y requisitos cambiantes. En ese sentido, me complace informar que hoy la Inteligencia del Senado introdujo un nuevo lenguaje para fortalecer la supervisión de los UAP en su proyecto de ley de autorización anual. Esto parece un acontecimiento auspicioso para la reunión inaugural de este nuevo grupo.
La cuestión de los UAP en Estados Unidos siguió este patrón familiar. Pasé meses trabajando con el funcionario del Pentágono, Lue Elizondo, tratando de lograr que altos funcionarios del Departamento de Defensa se involucraran en el tema de la IP, pero pronto quedó claro que nada cambiaría sin el interés y la dirección del Congreso. Afortunadamente, después de que organizamos que los aviadores de la Marina compartieran sus experiencias de primera mano con los UAP con el Congreso, el tema ganó fuerza en el Capitolio. Uno de los senadores informados por los aviadores de la Armada fue Bill Nelson, quien luego se convirtió en Director de la NASA. Estoy seguro de que estas sesiones informativas son la razón por la que se convirtió en el primer director de la NASA en reconocer la legitimidad de la UAP.
Después de estas sesiones informativas, recomendé al Congreso que solicitara un informe sobre los incidentes de UAP al Departamento de Defensa y a la comunidad de inteligencia. Aunque la Fuerza Aérea afirmó que no tenía ningún informe pertinente antes de 2020, el informe aún identificó 144 encuentros militares con UAP desde 2004. Al hacerlo, el informe validó la realidad de los UAP y estimuló una mayor investigación del Congreso, lo que finalmente condujo al establecimiento de una nueva organización, la Oficina de Resolución de Anomalías de Todos los Dominios (AARO) dedicada a compilar, analizar e investigar informes de UAP. Ahora que los miembros del Congreso participan activamente y se implementan las directrices para la presentación de informes sobre UAP, estamos viendo una explosión de informes sobre UAP. Entre 2004 y 2021 se recibieron menos de 10 informes de UAP por año. Ahora, cada año se reciben cientos de informes militares sobre UAP. Será fascinante observar este proceso en los años venideros para ver qué lecciones se aprenden y qué descubrimientos se hacen.
Conclusión
Lo que he tratado de ilustrar hoy es el papel vital de los funcionarios electos en el avance de la seguridad nacional. Debido al ritmo sin precedentes al que está cambiando el entorno de seguridad, nunca ha sido más importante que los legisladores nacionales examinen enérgicamente y, cuando corresponda, cuestionen el status quo. Como lo demuestran estos ejemplos, abandonadas a su suerte, nuestras vitales pero masivas organizaciones de seguridad a menudo no revelan información importante ni implementan reformas críticas. Si no fuera por la acción del Congreso, el público todavía no tendría idea de cuántas colisiones casi en el aire con UAP han ocurrido, con qué frecuencia se informan UAP o la frecuencia y el alcance de los informes de UAP. Hoy en día, los UAP seguirían violando el espacio aéreo militar con impunidad; los pilotos y operadores de radar seguirían temiendo informar de estos acontecimientos; y no habría una oficina para recibir y analizar datos de UAP o desarrollar nuevas estrategias de recopilación. Por eso siento con tanta fuerza la importancia de lo que están haciendo y agradezco esta oportunidad de aplaudir y alentar sus esfuerzos.
El establecimiento del Caucus UAP ejemplifica el compromiso de Japón con el progreso, la innovación y el avance de la comprensión humana. Se enfrenta a lo desconocido con una mente abierta y un ojo crítico. Las posibles ramificaciones científicas y de seguridad nacional son profundas y de inestimable importancia.
En conclusión, aplaudo la integridad intelectual que está demostrando al colocar la ciencia y la seguridad nacional por encima de estigmas obsoletos. Felicitaciones a todos los miembros de este distinguido grupo por su liderazgo visionario. Que sus esfuerzos produzcan descubrimientos fructíferos y allanen el camino para un futuro donde el conocimiento y la curiosidad, en lugar del miedo, guíen nuestro progreso.
Arigatou gozaimasu
Muchas gracias
Complemento
MUNDO
Se inició una investigación ovni en Japón después de que un informe estadounidense designara la región como “punto crítico” para avistamientos.
Los avistamientos de ovnis no deben descartarse porque en realidad podrían ser drones de vigilancia o armas, dicen los legisladores japoneses que crearon un grupo el jueves para investigar el asunto. La investigación se produce menos de un año después de que el Departamento de Defensa de Estados Unidos emitiera un informe calificando a la región como un “punto crítico” para avistamientos de misteriosos objetos.
El grupo no partidista, que cuenta con ex ministros de defensa entre sus más de 80 miembros, instará a Japón a aumentar sus capacidades para detectar y analizar fenómenos anómalos no identificados (UAP), más comúnmente conocidos como OVNIs u objetos voladores no identificados.
Aunque el fenómeno se asocia a menudo con los hombrecitos verdes en la imaginación popular, se ha convertido en un tema político candente en los Estados Unidos.
El Pentágono dijo el año pasado que estaba examinando 510 informes de ovnis, más del triple que en su archivo de 2021.
Los parlamentarios japoneses esperan armonizar la percepción interna sobre los UAP con la de su aliado, tras varios sustos relacionados con sospechas de operaciones de vigilancia.
“Es extremadamente irresponsable de nuestra parte resignarse al hecho de que algo es incognoscible y seguir haciendo la vista gorda ante lo no identificado”, dijo antes del lanzamiento el miembro del grupo y ex ministro de Defensa Yasukazu Hamada.
En una situación embarazosa para el Ministerio de Defensa de Japón, recientemente se difundieron en las redes sociales chinas imágenes no autorizadas de un helicóptero destructor atracado después de una aparente intrusión de un dron en una instalación militar.
Y el año pasado, el ministerio dijo que “presume firmemente” que los objetos voladores avistados en los cielos japoneses en los últimos años eran globos de vigilancia enviados por China.
En Japón, los ovnis han sido vistos durante mucho tiempo como “un asunto oculto que no tiene nada que ver con la política”, dijo el legislador opositor Yoshiharu Asakawa, un miembro fundamental del grupo.
Pero si resultan ser “armas secretas de última generación o drones espías disfrazados, pueden representar una amenaza significativa para la seguridad de nuestra nación”.
“Hospot” para avistamientos de UAP
En 2022, el Departamento de Defensa de EE. UU. estableció la Oficina de Resolución de Anomalías de Todos los Dominios (AARO) para investigar los UAP y al año siguiente lanzó un sitio web para proporcionar al público información desclasificada sobre los misteriosos objetos.
Un informe de la AARO del año pasado designó la región que se extiende desde el oeste de Japón hasta China como un “punto crítico” para avistamientos de UAP, basándose en las tendencias entre 1996 y 2023.
Más tarde concluyó, en una revisión de 60 páginas ordenada por el Congreso, que no había pruebas de tecnología extraterrestre ni intentos del gobierno de Estados Unidos de ocultarla al público.
Los legisladores japoneses presionarán para que el país cree un equivalente a la AARO del Pentágono e impulse aún más la cooperación en inteligencia con Estados Unidos.
Christopher Mellon, experto en UAP y ex funcionario de inteligencia estadounidense, elogió el lanzamiento del grupo como “notable”.
Desde drones hasta vehículos hipersónicos, la guerra en Ucrania ha demostrado que “las armas no tripuladas y la inteligencia artificial están creando nuevos desafíos muy serios”, dijo Mellon a los parlamentarios japoneses en un discurso en línea.
En diciembre, una base de la Fuerza Aérea de Estados Unidos fue sometida a una misteriosa intrusión de drones que duró varias semanas, pero “todavía no sabemos de dónde venían”, dijo.
Un “esfuerzo de la UAP contribuye a nuestra comprensión de este tipo de cuestiones”.
En los EE. UU., el Congreso ha mostrado un mayor interés en aprender más sobre la detección y notificación de UAP. Un subcomité de la Cámara celebró una audiencia pública que acaparó los titulares el verano pasado en la que participaron un ex oficial de inteligencia y dos pilotos que testificaron sobre su experiencia con los UAP. Los legisladores han seguido exigiendo respuestas y recientemente celebraron una reunión informativa clasificada con el inspector general de la comunidad de inteligencia.
En septiembre, un grupo independiente de científicos y expertos convocado por la NASA no encontró evidencia de que los UAP sean de naturaleza “extraterrestre”, pero enfatizó que se necesitan mejores datos para comprender algunos encuentros que han desafiado toda explicación.
La NASA formó el grupo de 16 expertos en 2022 para examinar cómo la agencia espacial puede contribuir mejor a la comprensión científica de los objetos, que han sido informados por cientos de pilotos militares y comerciales.
Eleanor Watson y Stefan Becket contribuyeron a este informe.
